Soy muy aficionado a los crucigramas, los cuales no sólo me divierten sino también enriquecen mi conocimiento. Reconozco que aparecen en estos rompecabezas literarios preguntas que le hacen reventar a uno la testa por largo rato.
Crucigrama es una palabra derivada de dos vocablos; uno latino: crux – crucis que significa cruz, y el otro vocablo es el griego gramma que significa letra. Guardadas todas las diferencias, es en La Cruz del Calvario ese crucigrama donde se “resolvió la Salvación” por medio de aquel que es La Palabra hecha hombre, Jesús el Señor. Es por esa razón que para muchos la Cruz es una locura o un rompecabezas, pero para otros es Poder de Dios.
Volviendo al crucigrama, traigo a mi memoria una expresión que aparecía allí a manera de enigma: “Remedio infalible”, y solo había casillas para una palabra de cuatro letras; resultó que la palabra en la que menos pensé y que era la acertada es: Risa.
A propósito. Ha sido muy sonado por estos días el caso de una exsenadora de la República quien se fugó estando condenada a 15 años de prisión por ilícitos cometidos en el debate electoral pasado. La fuga de Aída Merlano se dio luego de su cita con el odontólogo, el pasado martes 1 de octubre, para continuar con un tratamiento de diseño de sonrisa.
Permítame le sugiero a los creativos del crucigrama, para que ya no la llamen “remedio infalible” debido a que en el tan sonado caso se habla de risas, pero risas de burla a la institucionalidad, empezando por el alto gobierno hasta las bases mismas de la sociedad.
Quién creyera que por un diseño de sonrisa quedara el país tan mal parado frente a la Comunidad Internacional. Hoy a la que se le debe hacer un diseño de sonrisa es a nuestra muy amada Colombia.
Aun así, hay una oportunidad para todos los que se sienten burlados y siguen llorando sus propias penas en su tránsito por este valle de lágrimas, llevando sobre sí una marcada desesperanza y un lastre de dolor a causa del pecado. Les presento al Cordero de Dios, Quien sobre el “Crucigrama” de la historia fue erigido y con su propio Sacrificio nos puso en paz y de paso nos reconcilió con Dios, devolviéndonos de una vez por todas el “diseño de sonrisa” librándonos de la cárcel donde nos tenía presos satanás.
Libres pues, de estas cadenas y por las vías legales, ahora podemos repetir las palabras de los siguientes salmos:
Señor, has cambiado mi lamento en baile; Desataste mi cilicio, y me ceñiste de alegría. Por tanto, a ti cantaré, gloria mía, y no estaré callado.
Señor Dios mío, te alabaré para siempre. Salmo 30:11-12Cuando el SEÑOR hizo volver a Sión a los cautivos, nos parecía estar soñando. Nuestra boca se llenó de risas; nuestra lengua, de canciones jubilosas. Hasta los otros pueblos decían: «El SEÑOR ha hecho grandes cosas por ellos.» Salmo 126:1-2
No fue necesario entonces escaparnos de prisión, francamente era imposible hacerlo por nuestros propios medios, pero vino nuestro abogado y Señor, Jesús, y nos sacó de la prisión, pagó nuestra deuda y nos lleva a lugares espaciosos de los cuales nadie quiere volver a salir.
Rvdo. Nicolás Ocampo J.
Pastor