Por estos días y cada año, el tema de moda en nuestra sociedad son los disfraces o también llamadas máscaras. Todos hemos oído y de sobra acerca de este tema tan trillado, que de tanto trillarlo, a veces ni le prestamos atención,
Y simplemente atinamos a decir que es un tema que ya debemos dejar de rebatirlo y damos por sentado que está fuera del caso tanto en lo espiritual como en lo social. ¡No! ¿Porqué?
Porque en cuanto a lo social creo que cada año eso que llamamos fiesta de los niños toma fuerza, pero no pasa menos en el mundo de los adultos. Y aunque no dejamos de reconocer que esto de las máscaras y disfraces tiene una alta dosis de espiritismo o culto a satanás, también tiene algo que ver en que es una manifestación de carencias entre los adultos.
Anteriormente los adultos se avergonzaban de disfrazarse y todos sus vacíos los suplían disfrazando a sus niños. En la actualidad ya son los unos y los otros quienes se disfrazan y lo más visible es que se buscan disfraces de adultos para los niños, mientras que los adultos se disfrazan como niños.
Como pastor me pregunté por estos días si aparte de lo que significa el disfraz en el mundo espiritual había otro tipo de fenómeno, y me encontré con las siguientes frases expresadas por algunos célebres personajes, las cuales dejo a consideración de quien a esta hora lee este artículo. Veamos:
– “Vuestra alegría es vuestra tristeza sin máscara”. (Khalil Gibran)
– “No hay disfraz que pueda largo tiempo ocultar el amor donde lo hay, ni fingirlo donde no lo hay”. (François de La Rochefoucauld)
– “Elegir la propia máscara es el primer gesto voluntario humano. Y es solitario”. (Clarice Lispector)
– “A algunos hombres los disfraces no los disfrazan, sino los revelan. Cada uno se disfraza de aquello que es por dentro”. (G.K. Chesterton)
– “Cuando llevas una máscara tanto tiempo, te olvidas de quién eras debajo de ella”. (Alan Moore)
– “Todo disfraz repugna al que lo lleva”. (Silvina Ocampo)
– “Una máscara nos dice más que una cara”.(Oscar Wilde)
– “La posibilidad de quitarse la máscara en todas las ocasiones es una de las raras ventajas que reconozco a la vejez”. (Marguerite Yourcenar)
Uno llega a un momento de la vida en que de la gente que ha conocido son más los muertos que los vivos. Y la mente se niega a aceptar otras fisonomías, otras expresiones: en todas las caras nuevas que encuentra, imprime las viejas copias; para cada una encuentra la máscara que más se adapta.
Por lo tanto, creo que la mayoría de la gente pasa disfrazada todo el tiempo.
Además, por lo que sea, no olvidemos que satanás ha usado y hace que sus seguidores y en muchas ocasiones los que no le siguen utilicen ocasional y permanentemente una máscara con la cual se cubren su propia mentira e hipocresía.
No creamos pues que el asunto del disfraz se celebra una sola vez al año, si no más, eso creo, todos los días.
Esto del disfraz no es un tema que debemos ignorar, sino ocuparnos en oír estas advertencias cada vez más vigentes, de la Eterna Palabra de Dios:
“Cuídense de los falsos profetas. Vienen a ustedes disfrazados de ovejas, pero por dentro son lobos feroces.” Jesús. Mateo 7:15
“Porque éstos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo. Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz.
Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras.” 2 Corintios 11:13-15
Rvdo. Nicolás Ocampo J.
Pastor