En otras oportunidades he dicho que, además de los cinco sentidos que nuestro cuerpo desarrolla, necesitamos otros sentidos que normalmente tienen que ver con nuestra capacidad emocional, me refiero al sentido de valía, al sentido de pertenencia y al sentido de competencia.
Ahora bien, creo que todos en la vida experimentamos el sentimiento de incompetencia, es decir, podemos sentir que somos incapaces, insuficientes, ineptos, torpes, ignorantes o no dignos de hacer una labor.
Esta sensación de incompetencia puede tener varias causas. Por ejemplo:
– La Edad: (Abraham y Sara)
Entonces Abraham inclinó el rostro hasta el suelo y se rió de pensar: “¿ACASO PUEDE UN HOMBRE TENER UN HIJO A LOS CIEN AÑOS, y ser madre Sara a los noventa?”. Génesis 17:17
Por eso, Sara se rió y pensó: “¿Acaso voy a tener este placer, ahora que YA ESTOY CONSUMIDA Y MI ESPOSO ES TAN VIEJO?”. Génesis 18:12
– La baja estima: (Moisés)
Pero Moisés le dijo a Dios: ¿Y QUIÉN SOY YO para presentarme ante el faraón y sacar de Egipto a los israelitas?. Éxodo 3:11
– Estar en situación de discapacidad: (Moisés)
Señor, yo nunca me he distinguido por mi facilidad de palabra objetó Moisés. Y esto no es algo que haya comenzado ayer ni anteayer, ni hoy que te diriges a este servidor tuyo. Francamente, ME CUESTA MUCHO TRABAJO HABLAR. Éxodo 4:10
– La posición familiar: (Gedeón)
Pero, Señor objetó Gedeón, ¿cómo voy a salvar a Israel? MI CLAN ES EL MÁS DÉBIL de la tribu de Manasés, y yo SOY EL MÁS INSIGNIFICANTE DE MI FAMILIA. Jueces 6:15
– La posición social: (David)
Pero David le respondió: ¿QUIÉN SOY YO? ¿Y quiénes son en Israel mis parientes, o la familia de mi padre, para que yo me convierta en yerno del rey?. Esto se lo repitieron a David, pero él respondió: ¿Creen que es cosa fácil ser yerno del rey? ¡YO NO SOY MÁS QUE UN PLEBEYO INSIGNIFICANTE!. 1 Samuel 18:18 y 23
– La falta de preparación: (Jeremías)
Yo le respondí: “¡Ah, Señor mi Dios! ¡SOY MUY JOVEN, Y NO SÉ HABLAR!” Jeremías 1:6
– El Pecado: (David)
CONTRA TI HE PECADO, sólo contra ti, y he hecho lo que es malo ante tus ojos; por eso, tu sentencia es justa, y tu juicio, irreprochable. Yo sé que SOY MALO DE NACIMIENTO; pecador me concibió mi madre. Salmo 51:4-5
Seguramente si buscáramos más ejemplos en la Biblia, los encontraríamos y podríamos definirlos como otras causas por las cuales sentimos ser incompetentes.
Preguntémonos hoy por aquello que sabemos que Dios nos está llamando a hacer, pero, en lo que nos sentimos incompetentes.
Pensemos a la luz de los textos leídos aquello que pudiera ser el motivo por el cual nos sentimos nulos, ineficaces y hasta inútiles.
El sentido de competencia es la seguridad que tiene una persona en relación con el nivel de preparación para hacer frente a las situaciones que le vayan surgiendo a lo largo de la vida. Esta sensación da la tranquilidad de saber que, basándonos en nuestros conocimientos y capacidades, podremos salir adelante, sea cual sea el problema que se nos plantee.
Las personas que se sienten competentes tienen una autoestima elevada y se sienten seguras de sí mismas. Por el contrario, una persona que crea que no es competente, se sentirá insegura y vivirá con miedo a los cambios y situaciones nuevas, lo que reducirá su autoestima y por lo tanto su capacidad de acción y hasta su obediencia a Dios.
¿Le gustaría escuchar lo que Dios le respondió a cada persona que invitamos hoy en los versículos anteriores?
– A la edad.
A LO QUE DIOS CONTESTÓ: ¡PERO ES SARA, tu esposa, la que te dará un hijo, al que llamarás Isaac! YO ESTABLECERÉ MI PACTO CON ÉL y con sus descendientes, como pacto perpetuo. Génesis 17:19
Pero EL SEÑOR LE DIJO A ABRAHAM: ¿Por qué se ríe Sara? ¿No cree que podrá tener un hijo en su vejez? ¿ACASO HAY ALGO IMPOSIBLE PARA EL SEÑOR?. El año que viene volveré a visitarte en esta fecha, y para entonces Sara habrá tenido un hijo. Génesis 18:13-14
– La baja estima.
YO ESTARÉ CONTIGO LE RESPONDIÓ DIOS. Y te voy a dar una señal de que soy yo quien te envía: Cuando hayas sacado de Egipto a mi pueblo, todos ustedes me rendirán culto en esta montaña. Éxodo 3:12
– En situación de discapacidad.
¿Y QUIÉN LE PUSO LA BOCA AL HOMBRE? LE RESPONDIÓ EL SEÑOR. ¿Acaso no soy Yo, el Señor, quien lo hace sordo o mudo, quien le da la vista o se la quita? Anda, ponte en marcha, que yo te ayudaré a hablar y te diré lo que debas decir. Éxodo 4:11-12
– La posición familiar.
EL SEÑOR RESPONDIÓ: Tú derrotarás a los madianitas como si fueran un solo hombre, PORQUE YO ESTARÉ CONTIGO. Jueces 6:16
– La posición social.
“Pues bien, dile a mi siervo David que ASÍ DICE EL SEÑOR TODOPODEROSO: YO TE SAQUÉ DEL REDIL PARA QUE, EN VEZ DE CUIDAR OVEJAS, GOBERNARAS A MI PUEBLO ISRAEL. YO HE ESTADO CONTIGO por dondequiera que has ido, y por ti he aniquilado a todos tus enemigos. Y ahora VOY A HACERTE TAN FAMOSO como los más grandes de la tierra. 2 Samuel 7:8-9
– La falta de preparación.
Pero EL SEÑOR ME DIJO: “NO DIGAS: Soy muy joven, porque vas a ir adondequiera que yo te envíe, y vas a decir todo lo que yo te ordene. No le temas a nadie, QUE YO ESTOY CONTIGO PARA LIBRARTE.” Lo afirma el Señor. Luego extendió el Señor la mano y, TOCÁNDOME LA BOCA, ME DIJO: HE PUESTO EN TU BOCA MIS PALABRAS. Jeremías 1:7-9
– El pecado.
¡He pecado contra el Señor! Reconoció David ante Natán. EL SEÑOR HA PERDONADO YA TU PECADO, y no morirás contestó Natán. 2 Samuel 12:13
Para enfrentar el sentimiento de incompetencia:
- Reconozca su incompetencia. (Real o imaginaria)
- Reconozca la Omnipotencia de Dios.
- Siéntase amado por el Señor.
- Fije su mirada en el Señor Jesús.
- Emprenda lo que debe hacer.
Con amor en Jesús el Señor,
Rvdo. Nicolás Ocampo M.
Pastor