Nuestra vida es una creación divina, fruto de un proceso natural diseñado y construido por Dios. En la vida, al igual que en un edificio, cada paso es crucial; saltarse uno puede tener consecuencias infaustas.
Cuando intentamos acelerar la obra de Dios, asumiendo el control y confiando en nuestras fuerzas, luchamos inútilmente. La impaciencia por alcanzar la plenitud y bienestar puede ser desesperante, pero ese afán nos lleva a luchas perdidas y fracasos reiterativos.
En cambio, desarrollar la paciencia y la confianza en el plan de Dios para tu vida permite que Él siga obrando en ti sin interrumpir Su diseño. Él sabe mejor que tú lo que te hace perfecto.
No te afanes por metas efímeras, esas que cuando cruzas la línea, te das cuenta de que carecen de valor eterno. Dios te está edificando, y Él hace Su trabajo a la perfección.
Confía, espera y permite que la obra de Dios se cumpla en ti.
Medita en esto:
• La vida es un proceso natural diseñado por Dios. Efesios 1:4 – Jeremías 1:5 – Salmo 139:13-16 – Salmo 22:9-10 – Isaías 46:4 – Salmo 48-14 – Juan 11:25
• Cada paso es importante y no debe saltarse. Lucas 12:22-26
• Intentar apresurar el plan de Dios puede llevar a problemas. Santiago 4:13-17
• Es importante confiar en Dios y tener paciencia. Salmo 37:1-11 – Salmo 40: 1-5 – Gálatas 4:4-7
• No debemos intentar tomar el control de las situaciones con nuestras propias fuerzas y habilidades. 1 Juan 2:17
• A pesar de ti, Dios terminará lo que empezó en tu vida. Filipenses 1:6
• Tu trabajo es dejarte moldear. Romanos 9:20-21.
• Tómese su tiempo, el afán es perjudicial para la vida. Proverbios 19:2 – Mateo 6:34
Te invito a ejercitar esto de “tomar un poco de tiempo” y leer cada una de las citas Bíblicas aquí mencionadas.
Rvdo. Nicolás Ocampo Jr.
Pastor
