La paz
Después de enviar el acostumbrado texto bíblico a todos mis contactos; el día que compartí el de las Palabras del Señor Jesús en Mateo 24:7-8, una hermana de la Congregación me escribió preguntándome cómo debemos orar.
Después de enviar el acostumbrado texto bíblico a todos mis contactos; el día que compartí el de las Palabras del Señor Jesús en Mateo 24:7-8, una hermana de la Congregación me escribió preguntándome cómo debemos orar.
En días pasados mientras hablaba con mi esposa y mi hija, les decía que Siempre me siento feliz, a pesar de haber tenido que cruzar por momentos bastante difíciles aun desde que era niño.
Por “lenguaje inclusivo en cuanto al género” se entiende la manera de expresarse oralmente y por escrito sin discriminar a un sexo, género social o identidad de género en particular y sin perpetuar estereotipos de género.
…el vino que alegra el corazón, el aceite que hace brillar el rostro, y el pan que sustenta la vida. Salmo 104:15
…pueden tomar medidas que acelerarán o podrían acelerar la muerte.
Mientras escuchaba el sermón del domingo pasado, el Pastor, quien además es mi papá, dijo que, aunque haydiferentes versiones y revisiones de la Biblia, la mejor de ellas es la que cada creyente vive.
en una obligación.
En vez de dar realce a la autonomía y el respeto a uno mismo, el enfoque de los defensores del suicidio y de la filosofía de “morir dignamente” logra precisamente lo opuesto: en última instancia, degradan la integridad del individuo y el significado de su existencia.
Todos los creyentes en Cristo Jesús, hemos experimentado el contraste que genera el profundo deseo de no pecar, frente a la realidad de estar sometidos a la carne. Este estado genera una terrible insatisfacción porque muchas veces nos roba el gozo.
Lo que por todos es bien sabido, en menos de una semana, dos personas recibieron en Colombia (Cali y Medellín), “la muerte con dignidad” a causa de padecimientos y deterioro en su salud.
El prudente ve el peligro y lo evita; el inexperto sigue adelante y sufre las consecuencias. Proverbios 22:3