¡Papá reconocido! I parte
Honra a tu padre y a tu madre, para que disfrutes de una larga vida en la tierra que te da el Señor tu Dios. Éxodo 20:12
Honra a tu padre y a tu madre, para que disfrutes de una larga vida en la tierra que te da el Señor tu Dios. Éxodo 20:12
Ciertamente todos sabemos que cuando los niños nacen, son indefensos e incapaces de sobrevivir sin el cuidado, la protección y la instrucción de sus padres.
Muchos son los textos que se escriben, muchas son las conferencias que se dictan, y hasta muchas son las predicaciones que se dan en grandes alocuciones acerca de “cómo hacerse rico”
Reiteradas veces hemos oído decir a manera de enseñanza, que la familia es el núcleo de la sociedad. Por lo tanto, todo lo que suceda al interior de la familia, inevitablemente se va a ver reflejado en la sociedad, para bien o para mal.
Nunca, había llamado tanto mi atención el tema de la garganta y el cuello, como a partir del momento en el que el virus empieza a hacer estragos en el ser humano.
Si bien es cierto que las redes sociales se han convertido en una herramienta ciudadana para ejercer una mayor participación política y en un centro de depósito de información, también es cierto que se han convertido en instrumentos de manipulación de actores en su gran mayoría políticos, tan agitados por estos días.
Antes que nada, es muy importante que no debemos disfrazar la realidad cuando pasamos tiempos de aflicción. La realidad que actualmente vive nuestro país no es nada envidiable, y créame, que en mayor o menor proporción, este caos nos ha afectado a todos los colombianos y por supuesto que a la iglesia también.
Comprender la situación que vivimos en Colombia hoy, no puede ser el producto de una visión sesgada, no puede tener un tinte político y no debe responsabilizar sólo a un grupo determinado de personas. Esta situación es un asunto de todos.
Heb 9:27 TODOS NOSOTROS MORIREMOS UNA SOLA VEZ, y después vendrá el juicio.
Sin duda alguna los seres humanos tenemos una característica generalizada, aunque con algunas excepciones, y es que no nos gusta sufrir.
“El débil nunca puede perdonar. Perdonar es el atributo del fuerte”
Quiero con esta frase singular, empezar este saludo para tratar de hacerme entender por aquellos que aun piensan que Dios no puede perdonar.